EL
CAMBIO CLIMÁTICO
Producción
Periódico de Latitud Periódico
20
de enero del 2016
Hace
nueve años, a principio de enero del 2007 ya se hablaba
sobre el cambio climático y cómo estaba afectando
a la República Argentina.
Que
los inviernos serían más cálidos y con
lluvias y granizos muy intensos.
Vicente Barrios, superior del Conicet y miembro del Centro de
Investigación del Mar y la Atmósfera (CIMA) sostenía
que: "En el 2006 es una buena muestra de lo que será
el clima en los próximos 10 a 20 años. Habrá
inviernos más cálidos y tormentas severas todo
el año".
De esta forma explicaba que el efecto más adverso ocurrido
en la región de la Cuenca del Plata es la mayor frecuencia
y severidad en las inundaciones, tanto en los valles fluviales
como en áreas urbanas o en áreas de llanura.
"El costo ocasionado por estas nuevas condiciones climáticas
es extremadamente alto. Como ejemplo, si se consideran las pérdidas
como porcentaje del producto bruto interno (PBI), la Argentina
resulta uno de los 14 países más afectados por
las inundaciones, con pérdidas estimadas en más
del 1,1 por ciento de su PBI", según cifras
del Banco Mundial publicadas en El cambio climático en
la Cuenca del Plata, uno de cuyos autores es Barros.
"Hasta hoy, las lluvias aumentaron entre el 10 y el 15
por ciento. Hacia el futuro se está previendo un fuerte
calentamiento en la Cuenca del Plata, que puede provocar un
cambio en los caudales de los ríos", agregaba el
científico.
EL INCREMENTO DE LAS LLUVIAS
Con esta visión coincidia Osvaldo Canziani, copresidente
del Panel Intergubernamental de Cambio Climático de las
Naciones Unidas: "Se ha observado en los últimos
años un incremento notable de las precipitaciones, tanto
en intensidad como en frecuencia".
De esta forma, ponía como ejemplo la ciudad de Dolores,
en la provincia de Buenos Aires, en donde las marcas habían
superado, ese año transcurrido, el 2006, los 300 milímetros
de agua caída en un día. En la ciudad de Buenos
Aires, la última noche de abril del año 2006 había
sido de unos 330 milímetros, según los registros.
"Hubo también un aumento enorme de la humedad
en el aire, que está siendo analizado para el IPCC. Y
ha hecho que cayera pedrisco en la ciudad de Buenos Aires",
decía Canziani.
Aquel
año del 2006 tuvo granizadas muy destructivas tanto en
la Ciudad de Buenos Aires como en Rosario.
"El
aire húmedo se condensa en nubes. Hay una enorme cantidad
de vapor de agua. Para que se produzca granizo el período
de acumulación debe ser de más de una semana.
Si la masa nubosa excede los -33°C, se generan las masas
de hielo", explicaba Canziani.
En el caso de Barrios afirmaba: "Como consecuencia
de la expansión térmica de los océanos
y, en menor medida, por el deshielo de los glaciares y mantos
continentales de hielo, se estima que aumentará el nivel
medio del mar, que hacia 2100 estaría en alrededor de
60 centímetros por encima de su nivel actual".
"Durante el siglo XX el mundo se calentó 0,7°.
Del compromiso planetario para revertir esta situación
depende el cambio", concluía Barros.
Fuente: diario La Nación, de Buenos Aires, Argentina;
2 de enero de 2007
Caracteres:
3175